/pitangueras/

/para la banda sostenida/

Me orejé, en qué frontera

nunca perdida allá ité inocencia


donde ensordecen los pastos o tiemblan

bemoles sostenidos campos cruzados

para estallar a puro gusto no más el aroma a montecito,




¡a propósito! , puesto aquí; bajo mi cáscara

ese borbotón de talas y pitangas...

¿Será que he callado tantas endiabladas siestas?

Pasarse rienda de horas hacia atrás…

El paraje de “la casita”:

Soplar el aire por dentro de los abuelos;




alma de padre, la espumosa sangre que aún late




como arroyito sabor a culantrillos


 o en otros tiempos,  a cocotero

¡que rico sabor a barro! pegajoso, pura fibra y fresquito claro. Un puente después…

arrastrarse y buscar gusanos, a riendas suelta como lagartos, ¡corajudos! ;


 despojarse de las rodillas, y... “no vale llevar ramitas”…


Tiempos sin malicias, descalzos, pisar ortigas, toritos o cualquier tipo de espinas…


 ¡ que vaaa! total?  salimos adornadas las cabezas con millonadas de

¡“pega-pegas”!...Amor del campo…; esos plenos veranos...

¿Será que he callado tantas endemoniadas siestas?...- ¡aojo Lucía!, que meee pa-re-ce , queee, detrás de tiiii, estáaa ,sonandooo  laaa ¡cascabel Isabelaaa! …

Etiqueta: estampitas de mi tierrita colorada /frag. “la casita”/ M.L. Misiones- Argentina.2010.